Durante un siglo, Chanel No.5 ha resistido los caprichos de la moda y el paso del tiempo, como si Coco Chanel hubiera encontrado la fórmula de la eterna feminidad. ¿Cuál es el secreto de su éxito? Una sensual mezcla de ámbar que todavía hoy se considera un hito en la perfumería. Pero también se trata de ese magnífico frasco cuadrado, una obra maestra de sencillez que inspiró el trabajo de los artistas de vanguardia. Se exhibe en el MoMA como una obra de arte, un ícono atemporal que conquistó a Dalí y Andy Warhol. A partir de la relación entre Coco y un príncipe ruso y terminando en la actualidad, este libro cuenta la historia de cómo la leyenda de una fragancia entró en el imaginario colectivo gracias a las palabras de Marilyn Monroe: "¿Qué me pongo en la cama? Cinco gotas de Chanel No. 5 y nada más." A partir de ese momento, la Maison Chanel siempre ha elegido hermosas estrellas con clase innata para los anuncios del icónico perfume, que se vuelven aún más fascinantes gracias a los grandes fotógrafos que retratan estos rostros. Son fieles, como millones de mujeres, a la ley de Coco Chanel: "Una mujer que no se perfuma no tiene futuro".